Al igual que en la preboda, el pequeño Rayito no podía falta en este día, que no perdió detalle de Mario mientras se ponía su chaleco a cuadros ¡Este chico siempre tan original!. Acompañado de sus familiares y amigos, Mario se preparaba para dar el “Sí quiero”.
Estefanía hacía lo propio en su habitación del Hotel Huerto del Cura de Elche. Llegamos cuando todavía la estaban maquillando, cosa que nos encanta, porque poder sacar estos momentos de preparativos no tiene precio. Estaba preciosa. Con ella estaban sus hermanas, vestidas con sus batas conjuntadas y Elena ensayaba su lectura en la habitación sin evitar pensar que su comienzo “Querido amigo Gayo…” pudiera provocarle la risa a más de uno en la iglesia, incluida a ella misma. ¡No era para menos!. Pero sin duda, el momento en el que se les paró el corazón fue cuando su padre entró en la habitación para darle a Estefanía su precioso ramo. Estos momentos nos ponen la piel de gallina, porque se puede palpar la emoción contenida en el aire.
Los invitados y Mario esperaban en la Basílica de Santa María la llegada de Estefanía, increíblemente puntual. La ceremonia transcurrió con normalidad entre esos muros que tanto nos impresionan siempre que la visitamos.
Tras unos minutos de fotos por los alrededores de la Basílica, nos dirigimos de nuevo al Hotel para el banquete. Nos llamó la atención el sin fin de detalles y regalos que habían pensado para sus invitados, sin duda su boda se la dedicaban a todos ellos, y especialmente a Ana (hermana de Estefanía y embarazadísima que estaba) la que recibió el ramo de manos de su hermana. Sin duda, la boda finalizó con una tremenda fiesta que nos dejó grandes momentos de diversión y buenas risas. Que gran día pasamos!
Desde Bigote Verde, os deseamos toda la felicidad del mundo pareja!
Ceremonia: Basílica Santa María.
Celebración: Hotel Huerto del Cura.